
Aprovechando esta privilegiada localización, en el año 2007 se inauguró, junto a las orillas del río Vilcanota, un suntuoso establecimiento de lujo: el hotel Sumaq Machu Picchu. Inspirado arquitectónicamente en la enigmática 'ciudad perdida' de los incas, este hotel de cinco estrellas fue construido en la carretera que conduce a las ruinas arqueológicas de Machu Picchu, consideradas como una de las nuevas Siete Maravillas del Mundo.
El Sumaq Machu Picchu dispone de 5.500 metros cuadrados de superficie construida y su infraestructura es de gran belleza. Los afortunados que lo han visitado aseguran que la experiencia en este hotel es inolvidable, debido a su moderno ambiente de lujo, su buen servicio y su perfecta situación en una zona de importante diversidad biológica, hábitat del 22 por ciento de las especies de aves existentes en Perú y de hasta 300 especies nativas de orquídeas.
En cuanto al alojamiento, los huéspedes pueden escoger entre 47 lujosas habitaciones Superior Deluxe, 11 Junior Suites y 3 Sumaq Suites. Todas ellas son espaciosas y cómodas y están bien equipadas. El restaurante Qunuq, en el segundo piso del hotel, brinda la posibilidad de probar las deliciosas propuestas gastronómicas de una cocina tan intensa y apreciada como la peruana. Gracias a los amplios ventanales del comedor, los visitantes podrán relajarse con las vistas de una frondosa y salvaje naturaleza. Para probar los cócteles regionales hechos con pisco (el típico licor peruano) y servidos por expertos bármanes, está el Suquy Café & Bar, que ofrece un ambiente encantador con su diseño ambientado en motivos incaicos. En el spa, los clientes se relajan con antiguas técnicas incas para el cuidado de cuerpo y el espíritu, con la ayuda de hábiles masajistas que utilizan aceites naturales extraídos de la hoja de coca y de esencias florales.
El Sumaq Machu Picchu es el lugar ideal para disfrutar de la interacción con la comunidad y el ambiente andino, aprovechando actividades dinámicas propuestas por el hotel como las clases de cocina peruana, la participación en rituales andinos y las excursiones ecológicas guiadas por una zona tocada por los dioses incas.